¿Conoces los riesgos de un blanqueamiento sin supervisión? El blanqueamiento dental es una de las técnicas más efectivas que hay para conseguir una sonrisa encantadora y resplandeciente. Sin embargo, en el afán de querer conseguirlo se puede caer en el error de abusar en el uso de productos blanqueantes. Cuyos efectos podrían ser letales para la salud bucodental.
Riesgos de un blanqueamiento sin control
Aunque hay productos blanqueantes (peróxido de hidrógeno, por ejemplo) que pueden ser sumamente efectivos, su eficacia se acorta cuando se utilizan sin supervisión médica con la urgencia de querer conseguir una sonrisa blanca en el menor tiempo posible. ¿Sabes cuáles son los riesgos de un blanqueamiento dental? Detállalos enseguida:
Abrasiones de esmalte
La abrasión dental refiere a la debilitación de una parte de la estructura dentaria, ocasionada por una técnica de higiene dental inadecuada. Básicamente, es el deterioro del esmalte dental, cuyo factor detonante podría ser el abuso de productos de blanqueamiento dental sin control. Aunque esta práctica comienza con la pérdida de la estructura dental, con el paso del tiempo suele alterar el área cervical de los dientes.
Las señales de alarma de la abrasión dental son lentas y progresivas, por lo que podría ser complejo de reconocer al inicio. Sin embargo, entre los principales síntomas destaca la sensibilidad dental, decoloración del esmalte de los dientes, retracción de las encías y surgimiento de grietas en el esmalte dental.
El tratamiento dependerá del factor que ocasionó esta alteración. En este caso, al destacar entre los riesgos de un blanqueamiento, lo principal es dejar de utiliza los agentes blanqueadores. Según corresponda, podrían emplearse resinas estéticas o resinas compuestas.
Quemaduras en encías
La utilización de productos mal conservados o en una concentración mayor a la recomendada por los especialistas en odontología, podría dar paso a quemaduras en los tejidos blandos de la boca. En especial, en las encías, una de las áreas más sensibles.
Las quemaduras en las encías surgen cuando el agente blanqueador entra en contacto con estos tejidos sensibles. Por lo general, porque no se utilizó un mecanismo de protección para impedir que las encías pudiesen resultar afectadas.
El peróxido de hidrógeno es uno de los agentes más empleados en un tratamiento de blanqueamiento dental. Sin embargo, al usarse de manera incorrecta suele ocasionar daños en la dentadura, sobre todo, quemaduras de encías.
Lo más conveniente es acudir a revisión médica para determinar el nivel de daño que han sufrido las encías. En función de los resultados, se podrá concretar el tratamiento más efectivo que permita revertir tales efectos.
Daños en la mucosa bucal
Están caracterizados por afecciones cuya lesión radica en una variabilidad en el color de la mucosa. Forman parte de los riesgos de un blanqueamiento porque están condicionados por la aplicación excesiva de agentes blanqueadores en una alta concentración.
El aspecto clínico de las quemaduras dependerá de la gravedad de las lesiones. Las quemaduras leves pueden producir lesiones blancas, mientras que las alteraciones intermedias pueden derivar en una mucositis localizada. Y las quemaduras más intensas llegan a coagular la superficie del tejido.
Entre los principales síntomas que suelen sentirse ante los daños en la mucosa bucal destaca enrojecimiento de la mucosa, hipersensibilidad y sequedad oral. El tratamiento de las quemaduras químicas por blanqueamiento dependerá de la intensidad de la lesión. Sin embargo, lo primordial es eliminar los restos de sustancias que han dejado los agentes blanqueadores.
Reabsorciones radiculares
Es uno de los mayores riesgos de un blanqueamiento. Las reabsorciones radiculares son procesos de destrucción de los tejidos sólidos de las piezas dentarias que pueden evolucionar en 2 fases, estimulación y reestimulación.
En la primera etapa, el estímulo afectado altera los tejidos no mineralizados, como el precemento que cubre la superficie externa de la raíz. Una de sus causas suele ser un procedimiento de blanqueamiento dental utilizando peróxido de hidrogeno al 30%. Y, la segunda fase está caracterizada por la continuación del proceso de reabsorción bajo una estimulación (daño) continua.
El proceso suele iniciar afectando la dentina y el cemento radicular. Sin embargo, la destrucción del tejido no se limita a estas áreas, puede extenderse al esmalte dental. De acuerdo al lugar en que se inicie el deterioro, el tipo de reabsorción puede variar. Por ejemplo, reabsorción interna (reabsorción de la predentina) y reabsorción externa (penetra hasta la dentina y puede comprometer la pulpa).
Una radiografía permitirá conocer el tipo de reabsorción radicular, y el tratamiento más idóneo.
En Titanium Dental estamos para preservar la estética de tu dentadura y tu salud bucodental por medio de nuestros tratamientos asistidos de blanqueamiento dental.