La prevención sigue siendo la mejor estrategia para cuidar nuestra salud bucodental, especialmente en los más pequeños. Uno de los tratamientos más sencillos, eficaces y poco conocidos para evitar las caries en niños y adolescentes (e incluso en adultos con riesgo elevado) es el sellado de fosas y fisuras.
En este artículo te explicamos en qué consiste este procedimiento preventivo, por qué es tan útil para prevenir la formación de caries, cómo se realiza y qué tipos de selladores existen. Todo, con un enfoque claro y profesional.
¿Qué es un sellado de fosas y fisuras?
El sellador de fosas y fisuras es un material fluido y resistente que se aplica sobre la superficie masticatoria de los molares y premolares. Su función es tapar las pequeñas hendiduras naturales (fosas y fisuras) que tienen estos dientes, impidiendo que restos de comida y bacterias se acumulen en ellas.
Aunque cepillemos correctamente, estas zonas son tan estrechas que el cepillo no llega bien a limpiarlas, lo que las convierte en el lugar perfecto para que se inicien las caries. El sellador actúa como una barrera física protectora.
Este tratamiento no duele, no desgasta el diente y no requiere anestesia.
¿Cuándo está indicado colocar un sellador?
Este tratamiento está especialmente recomendado en las siguientes situaciones:
- Niños entre 6 y 14 años: Es el momento clave en el que erupcionan los molares definitivos, que son los más vulnerables a desarrollar caries.
- Niños o adultos con alto riesgo de caries: Pacientes con higiene deficiente, consumo frecuente de azúcar o historia previa de múltiples caries pueden beneficiarse mucho del sellado.
- Personas con surcos profundos: Algunos dientes tienen fisuras muy marcadas por su anatomía, lo que dificulta su limpieza incluso con buena higiene.
¿Cómo se realiza el sellado de fosas y fisuras?
El procedimiento es muy rápido, totalmente indoloro y se puede realizar en una sola cita. Estos son los pasos habituales:
- Limpieza exhaustiva del diente
Se elimina cualquier resto de placa o alimento acumulado en la superficie del molar o premolar. - Aislamiento del diente
Se mantiene seco para que el material se adhiera correctamente. - Aplicación de un gel acondicionador
Este gel prepara el esmalte para que el sellador se fije de forma duradera. - Colocación del sellador
Se aplica el material líquido en las fosas y fisuras, adaptándose perfectamente a su forma. - Fotopolimerización (luz especial)
Con una lámpara LED se endurece el sellador en pocos segundos. - Revisión de la oclusión
Se comprueba que no molesta al morder y se ajusta si es necesario.
¿Qué tipos de selladores existen?
En la actualidad, los más utilizados son:
- Selladores de resina: Son los más comunes. Ofrecen buena durabilidad y estética.
- Selladores de ionómero de vidrio: Libera flúor, lo que ayuda a reforzar el esmalte. Se usa especialmente en pacientes con riesgo alto de caries.
- Selladores compuestos: Combinan propiedades estéticas y liberación de flúor.
El odontólogo evaluará qué tipo es más adecuado en función de la edad del paciente, la anatomía del diente y el riesgo de caries.
Beneficios de aplicar un sellador dental
- Prevención de la caries sin necesidad de tratamientos invasivos
- Indoloro, rápido y económico
- Duración de varios años con buen mantenimiento
- Ideal para pacientes infantiles o con dificultad de higiene
- Reduce costes futuros en empastes o endodoncias
¿Qué pasa si no se colocan selladores en dientes vulnerables?
- Mayor riesgo de caries en molares definitivos
- Necesidad de tratamientos restauradores más costosos
- Posible afectación del nervio si la caries avanza sin ser detectada
- Pérdida de dientes a edades tempranas
- Prevenir siempre será más sencillo, económico y saludable que curar.
Preguntas frecuentes
¿El sellador de fosas y fisuras es permanente?
No. Tiene una duración aproximada de 2 a 5 años, aunque puede mantenerse más tiempo con buen cuidado y revisiones periódicas. Si se desgasta, se puede reaplicar fácilmente.
¿Se puede poner en adultos?
Sí. Aunque es más común en niños, también se puede aplicar en adultos con anatomía dental complicada o riesgo elevado de caries.
¿Reemplaza al cepillado?
No. El sellador es una ayuda extra, pero no sustituye una buena higiene oral. El cepillado, el hilo dental y las visitas periódicas al dentista siguen siendo imprescindibles.
El sellador de fosas y fisuras es una herramienta de prevención eficaz, sencilla y segura. Ayuda a prevenir la formación de caries en las zonas más propensas y a proteger la salud dental desde edades tempranas. En Titanium Dental contamos con especialistas en odontopediatría y prevención que valorarán si tú o tus hijos necesitáis este tratamiento. Pide tu cita y déjanos ayudarte a mantener una sonrisa sana, desde la raíz.
