Aunque las desviaciones en la mordida son molestas y negativas desde un punto de vista estético, también son malformaciones bucales. Estas pueden ocasionar problemas a la hora de comer, tomar líquidos e incluso producen mucho dolor.
Hay problemas de encías que a largo plazo son consecuencia de mordidas que necesitan corrección. Por eso, existen diferentes tratamientos que tienen como objetivo devolver cada diente en su lugar y que todo funcione correctamente.
Si has notado alguna irregularidad en tus dientes, pero no sabes si es necesario utilizar ortodoncia, queremos que conozcas todos los detalles sobre ello.
Al identificar los tipos de mordidas, esto te podrá ayudar a entender cómo puedes solucionar el problema que estás presentado y además sabrás los tipos de mordidas que necesitan ortodoncia. ¡Comencemos!
¿Qué es la ortodoncia y por qué es necesaria en mordidas desviadas?
Al hablar de ortodoncia, no solo nos referimos a los brackets: este término se utiliza para hablar de todo el proceso que persigue la correcta posición de tus dientes o las estructuras dentomaxilofaciales.
En este caso, la ortodoncia una rama de la odontología que se centra en la adecuada posición de los dientes en el paciente.
Por tanto, se incluye desde la prevención de anomalías bucales, hasta el diagnóstico y tratamiento cuando ya se haya generado un problema de mordida.
Aquí se busca encajar las piezas superiores con las inferiores, y evitar desgastes de los dientes, problemas para masticar, dolores de mandíbula y otras enfermedades.
Si bien ahora son varios los tipos de ortodoncia que existen y los mecanismos para corregir los tipos de mordida (brackets, lingual incógnito, sistema Damon o alineadores transparentes), todas buscan poner cada pieza dental en su lugar.
¿Qué tipos de problemas de mordida requieren ortodoncia?
La mordida debe tener una alineación perfecta entre mandíbulas superiores e inferiores, englobando encías y dientes.
Una mordida incorrecta significa algún tipo de problema bucal, y por ello se requiere de una ortodoncia para conseguir la alineación ideal… ¿Cuáles son? ¡Ya te contamos!
- Mordida abierta
Se refiere al tipo de mordida en la que queda un espacio al masticar, debido a piezas que no encajan entre sí. Puede ser anterior, la cual ocurre cuando no se juntan los dientes posteriores, o posterior si hay un espacio entre los dientes frontales y no llegan a chocar.
- Mordida cruzada
La alineación normal de los dientes es que, al cerrar la boca, los dientes superiores se pongan sutilmente sobre los dientes inferiores. Si pasa al contrario y la pieza de abajo se encuentra por encima (aunque solo de un lado), entonces hay una mordida cruzada.
En caso de que exista un problema de las encías o en el espacio de formación de los dientes y estos no tengan espacio para salir en su posición, pueden apiñarse, nacer en diagonal o crear una segunda fila. Es uno de los tipos de mordida más comunes.
- Sobremordida
Si los dientes superiores cubren por completo a los inferiores, tampoco es algo normal, y se refiere a una descolocación de la mandíbula hacia afuera, por lo que se dice que “sobresale”
- Mordida Clase II
Este es un problema del mentón. Ocurre cuando la pieza inferior de la mandíbula está hacia el fondo o en la parte de atrás de la boca. Aquí, se observa un labio inferior y mentón hacia dentro, con una pronunciación que varía entre pacientes.
- Mordida Clase III
En este tipo de mordida pasa todo lo contrario y es el mentón aquel que está más delante de su posición. En estos casos, el labio inferior sobresale a diferencia del labio superior.
¿Reconociste entre los tipos de mordida cual puedes presentar? Si presentas algún tipo de problema, un profesional ortodontista podrá hacer el diagnóstico adecuado y ayudarte con los pasos a seguir para corregirla.